domingo, 20 de enero de 2008

En noches, de madrugada...



En noches, de madrugada

Cuando sólo hay silencio.

Calma la sed la esperanza

De que vuelvas a mi lecho.

Recapitulo labranzas

Con pensamientos certeros

De capitanes de barcos

Que perdieron sus veleros.

A la aurora la he rogado,

Que mande diez mandamientos,

Y que amarte sea uno,

Y que se repita luego.

La piel es mi testimonio.

El tatuaje del alma.

Y la cruz que llevo a cuestas

Por no saber si me amas.

Nadie entenderá lo nuestro.

La soledad, el castigo.

Pero seremos tan libres

Que no supondrá un suplicio.

 Calma tu sed con mi cuerpo,

Bebe hasta que te quedes lleno

Envenéname la carne

Y vuelve a tomarme luego.

Nunca dejes de quererme

Que sea tu penitencia,

Amarme entre las sombras

Será tu penitencia.

Y cuando todos se vayan

Y nos envuelva el silencio,

Susúrrame que me amas

Y hazme creer que es eterno.

 

Encarna Recio Blanco.




lunes, 14 de enero de 2008

Querida hija: (Carta de Dios)


Querida hija: 
Hace tiempo que quería escribirte para decirte: Que ya va siendo hora de que las niñas se conviertan en mujer y se levanten más temprano.

Que dejes de soñar con fantasías y vivas realidades. Que ése corazón que tanto encierra, no sufra por cosas tan banales. No sigas malgastando tus noches y tus días. ¡Ya es bastante!

 Sal de ésa abulia que adormecen tus cosas tan reales.

Sé que me quieres y que quieres igual a tus hermanos no sólo los de sangre. Pero te di los sentidos sanos, te di toda una vida por delante y en mitad de ella te digo: ¡Mejor te ordeno! no la malgastes.

 Aprovecha cada instante que te queda en cosas y causas beneficiosas.

Porque si no, cuando llegues a mi casa ¡si es que llegas! no lo tendrás tal fácil.

No te culpo a ti del todo por lo que pueda pasarte. Es necesario el dolor, el mar en tempestad, las tentaciones, para saber el precio y la medida, cuando se pierde o se gane. Empieza con semilla limpia a labrar en tu campo, la sementera estará abonada por tus obras.

El pan lo quiero muy limpio, para darme en comunión a personas como tú, que tienen hambre. Deja de retozar que ya está bien el tiempo que has perdido…Mira que luego se te hace tarde.

 Las heridas que llevas…No me culpes, pues yo te di dos ojos, no grandes, pero vez lo que tienes por delante.

¡De prisa! A levantarte, mira que llevas un minuto más perdido y esta, es mi última carta, ya lo sabes. Es duro el camino, hacia delante.

Y cuidado no tropieces, que tropiezas bastante.

Hasta aquí eras una niña, y era normal, pero ya vas para abuela, y no has pasado por madre… ¿Ves? Se te hizo tarde.

Encarna Recio Blanco.










viernes, 11 de enero de 2008

No soy de aquí, ni del viento...



No soy de aquí, ni del viento

Ni de las musas del mar

Mi origen está lejano

No lo puedo desvelar.

De donde nace la tierra

Y se llena de color

Donde no existe la guerra

Donde siempre sale el sol.

Soy de raíces certeras

Difíciles de arrancar

No se tocan con los dedos

A mi alma has de buscar.

Yo nací bajo la arena

Entre las olas del mar

Mi madre es la alegría

Mi padre la soledad.

Crecí entre verdes prados

Sobre ellos caminé

No conocí la mentira

Ni la desdicha después.

Pero al bajar a este mundo

Lo primero que encontré

Fue dolor y tanta rabia

Que me desquicié.

Estuve en muchas batallas

Sin rifles y sin fusil

Y nadie quiso ayudarme

A escapar de allí.

Quise volver a mi mundo

Donde no existía el mal

No encontraba la salida

Para poder escapar.

Por que manché de pecados

Mi alma tan virginal

Que lo malo con lo bueno

Es difícil de ligar.

 Ya no vi más a mis padres

No sentía felicidad

En los años que restasen

Pagaría mi pecar.

Sólo sé que cuando arrancas

Un rosal de su raíz…

Aunque después lo trasplantes

Nunca vuelve a resurgir.

Así arrancaron mi cuerpo

Le enseñaron a pecar

Y un alma tan agotada

Jamás vuelve a caminar.

 

Encarna Recio Blanco




miércoles, 9 de enero de 2008

Esta tarde me llegó...



Esta tarde me llegó

Una  gran paloma blanca

Y entre sus alas me traía

Un mensaje para el alma.

Me dijo que ya las guerras

Habían terminado,

Y que todo el universo

No estaba contaminado.

Me dijo que ya los niños

No morirían de hambre

Y junto a ellos tendrían

A sus madres y a sus padres.

Me dijo que ya los solos

Encontraron a un amigo,

Y que los tristes tenían

Una sonrisa de abrigo.

 Que los ciegos ya veían,

Que el enfermo sanaría,

Que el que no conocía el amor

Se enamoraría.

Me dijo que ya los mares

Todos estaban en calma,

Y que a la luna dejaban

Que por fin descansara.

Me contó las mil historias

Que siempre quería oír

Y mi alma alborota  gritaba...

¿Es que la Paz...ya está aquí?

 

Encarna Recio Blanco.




viernes, 4 de enero de 2008

Queridos Reyes Magos





Queridos Reyes Magos:

No sé cómo empezar esta carta ya que todo lo sabéis  de antemano, desde ese País mágico y misterioso.
 Como habréis comprobado los niños os piden siempre cosas materiales y se las traéis con sumo gusto.
El pedido de los mayores es diferente, por eso, yo os quiero pedir algo que tal vez, es más difícil de conseguir que un regalo, el día seis de Enero.

Quiero la Paz que nos han robado los mandatarios de un Mundo que se desgrana entre las guerras malditas. La pasión que no he visto este año en los ojos de los que me acompañaron por el camino de los días. La alegría tan escondida que a veces se pierde por los entresijos de este Mundo loco.
Os pido, conciencia para los inconscientes, luz para los perdidos.
 Para los tristes un toque de esperanza. Para los que están solos compañía.

Para los incomprendidos comprensión, y para los cobardes un poco de valentía,  coraje y corazón.
No os pido dinero, ni victorias, ni joyas que lucir en un cuerpo de bisutería, no os pido talentos ni valores materiales.
Me sobra fuerza y me quedan ganas para comprometerme con el Mundo, pero os pido, que durante el largo trayecto que me queda por recorrer me traigáis en las alforjas del viento ilusiones...Paz y Amor.

Que lleguéis al puerto que deseáis, eso sí, esquivando  la loca carrera entre coches, polución, prisas y escándalos, entre soledades, vanidades, y gente absurda.
Entre ustedes y yo  hay milenios de incomprensión, pero no han cambiado tanto las cosas a pesar del tiempo que nos separa.

Tal vez esta carta, les resulte un tanto especial y mas niña, de las que os puedan escribir los niños pequeñitos, si  les parece demasiado, me conformo simplemente con lo que os pido.

Cada año pongo en el balcón los zapatos nuevos, como cuando era una niña.
  En la calle hace frío ,mucho frío y en este momento pienso, que  algunos corazones también esta noche tiemblan sin tener cobijo, sin amor, con el desaliento de la soledad, por eso, os pido que a ellos, les traigáis también eso que tal vez necesitan y que no os piden.

Mis zapatos esta noche sé que se llenarán de esas cosas que no pueden verse.
Gracias por vuestros regalos Reyes Magos.


Encarna Recio Blanco




martes, 1 de enero de 2008

Queridos amigos internautas





Queridos amigos internautas:

Estrenamos un nuevo año y mis primeras palabras, mis deseos de venturas, van para todos vosotros amigos.  Para todos aquellos que me visitáis en mi humilde blog.
 Si mis palabras, mis poesías os hacen feliz me alegro, si os hacen recordar un amor, una situación, un recuerdo, me doy por entero satisfecha.
 Que el año recién estrenado os traiga Paz…Amor y todo aquello que sea bueno para vosotros.

Por estas tierras Murcianas, España, desde donde os escribo, hoy luce un sol especial, una temperatura agradable, parece como si el año que empieza hoy, se hubiera puesto sus mejores galas de luz para iluminar a aquellos que están solos, tristes, y lejos de sus seres queridos.

Hagamos un llamamiento todos aunados a los  mandatarios del Mundo entero  y sobre todo, para que esas Naciones del Mundo que están en conflictos bélicos puedan  seguir con claridad el camino de la Paz.

Amigos, un año feliz para todos, y que  juntos podamos luchar un poco más cada día por hacer un Mundo mejor. Por la  concordia entre todos los seres humanos.

Solo así, seremos capaces de hacer un Mundo mejor….ese es mi deseo.

Encarna Recio Blanco