Por mi corazón abierto
Por mis suspiros que siempre
Te dejo entre mis versos.
Los dejo bien cosidos
Con lágrimas
con lamentos
Con las
risas bien abiertas
Y con
muchos fugaces besos.
Hoy, amigo que te adentras
Por mis
surcos bien abiertos
Y te
pregunto si he llegado
A
recordarte algún sueño.
A sacarte alguna espina
El
dolor de un desamor
O tal
vez a resucitarte
El amor
que se escapó.
Tal vez
nunca nos veamos,
Pero si
te hice feliz
Mil gracias a Dios, hermano.
Encarna
Recio Blanco.