miércoles, 29 de enero de 2014

Ven y cobíjate..


Ven y cobíjate

Entre mis senos

Que yo te velo

Entre el mirlo y la estrofa

De nuestros  te quieros.

Ven  y mírame a los ojos

Sabrás que no te engañan

Cuando te digo

Te quiero.

Ven y abrázame con fuerza

Que tengo frío

Entra en mi cuerpo

Abrásame con tu fuego.

ven…

Encarna Recio Blanco.



martes, 21 de enero de 2014

Por la calle de las ánimas iba mi alma-Sátira.



Por la calle de las ánimas iba mi alma dormida.

Las mujeres desde la iglesia la miran compadecidas.

Hoy me enteré que te ibas que no volvería a verte

Que te casabas con otra hija de un terrateniente.

Se centraron en mis manos más de dos mil cicatrices

Y se abrieron en mi pecho más fuerte con más raíces.

Mis pasos  se pararon mirando el largo cortejo

Aumentando mis penas en varios kilos su peso.

Pasaste por la orilla de mi alma ya dormida

Saboreando el fracaso de tu vida y de mi vida.

De la mano caminabas con una mujer muy fea

Ella  iba  sonriendo…al parecer muy contenta.

Te encomendé a mi rosario y te recé un padrenuestro

Un Bendito Ave María y un credo que no recuerdo.

 Y vinieron a mi mente muchos hermosos recuerdos.

Algunas palabras rotas y besos que se perdieron.

Entendí con gran nostalgia la suerte que había tenido

Aunque todo terminase por haberte conocido.

Y comprendí que ser justo no es serlo cuando hay justicia

Es sentirlo y padecerlo cuando la misma termina.

Yo te quise y te quiero, y te querré de por vida

Y aunque pasen muchos años recordaré tu partida.

Te deseo muchas glorias y que seas muy feliz

Y cuando llegues al Cielo que Dios te hable de mí.

Por la calle de las ánimas detrás un largo cortejo

Pasa la novia de blanco y yo rezo...

Un Padre Nuestro.

 

Encarna  Recio Blanco.




lunes, 20 de enero de 2014

Las verdes praderas de mi Extremadura...

Las verdes praderas de mi Extremadura

Se visten de gala con mantos bordados.

 

Blancas son sus gentes, verdes sus praderas,

Y negra la pena de los que están fuera.

 

¡Verde...Blanca...Negra! ¡Esa es tu bandera!

 

! Ay mi Extremadura…qué pena!

Qué pena de tus emigrantes

Sudores nos cuesta no poder dar más

Para levantar ésa nuestra tierra.

 

Volvemos cansados de la gran ciudad

Donde sólo hay humos,

Prisas por llegar, pisos que son nidos

Trozos tan pequeños

De esa joya grande que es…

 

¡LA LIBERTAD!

 

Nos esperas con esa alegría de madre

Que anhela, abrazar al hijo que se fue de ella.

 

Te pones tus galas, las flores primeras,

Aires perfumados, Sol que brilla y quema.

¡Extrema en amores! ¡Dura en las partidas!

 

Tierra de poetas…tierra de pastores

De trigo y de olivos ¡De Conquistadores!

 

 

Encarna Recio Blanco.





viernes, 10 de enero de 2014

Yo no conocía el amor prohibido



Yo no conocía el amor prohibido

Del que muchos  hablan cuando aprieta el frío.

El de los poetas de los tiempos tristes

Que llenaban versos con sus cicatrices.

El de las leyendas de cuentos dormidos

De ninfas que surcan los valles, los ríos.

Ese amor que  pocos logran conocer

Sólo los que buscan en el  viejo edén

Y yo sin quererlo, conocí el amor

Ni se  sabe cómo, ni cuándo pasó.

Sólo sé que hubo huracanes de pasiones

Que cegaron todo con su resplandor.

Y aquellos poetas volvieron al mundo

  En sus mil leyendas escribimos juntos.

El amor aunque triste y sin fundamento

Sustenta la vida que  llevamos dentro.

Ahora ya os comprendo mis tristes poetas,

Sé cómo escribisteis todos los  poemas.

 

Encarna Recio Blanco.





Cuando apareciste comprendí



Cuando apareciste comprendí
Que no había conocido el amor
Ni la chispa del deseo
Ni la loca pasión.

Ahora sé que el amor
Es  tu Mundo
Por donde me pierdo
En un segundo.

Me pones del derecho, del revés
Me das marcha atrás
Siempre quise ganar y ahora...
Me dejo perder.

Encarna Recio Blanco.




martes, 7 de enero de 2014

Huele a tomillo y Jara mojada


 

Huele a tomillo y  jara mojada

 Sobre mi cama

Tu cuerpo es el prado

 Donde pacen mis ansias.

 Fuerte anatomía desplomada

 Sobre los cristales

 De mi alma.

 

Encarna Recio Blanco.



lunes, 6 de enero de 2014

Te pedí que te fueras...



Te pedí que te fueras
con ella  para siempre
por tu camino de espinas
y tu cruz, cual penitente.

Te lo dije con mil besos
pensando que eran los últimos
con el alma hecha jirones
y  mi  corazón  de luto.

Sin volver la cabeza te fuiste
sin mirarme a los ojos
sin decirme un adiós lastimero
tus pasos se perdieron.

Y los demonios  vinieron
para hacerme compañía
diciéndome con descaro
que era a mí, a quien querías.

Ya la noche me lloraba
y mi cuerpo más gemía
en mi lecho que revuelto
entre tu sudor... moría.


Encarna Recio Blanco