miércoles, 31 de diciembre de 2008

Queridos amigos: En estas últimas




Queridos amigos:
En estas últimas horas de este año que agoniza, lo primero que quiero deciros a vosotros que paséis una maravillosa noche en compañía de todos vuestros seres queridos.
Quisiera mandar un mensaje también a los mandatarios del Mundo entero,  aunque ellos, no sepan que existo. Que me rebelo ante tantos conflictos bélicos, tanta masacre, destrucción y miedo.

Israel insiste en la guerra hasta el fin, para erradicar al grupo palestino Hamas de la franja de Gaza. Esos niños con los ojos fijos en el Cielo, que no esperan a los Reyes Magos, sino al miedo de que puedan morir aplastados por las bombas que caen sin piedad en una tierra Santa.

Me rebelo amigos ante tanta barbarie, y en estas últimas horas del año que se nos va, no puedo por menos que gritar con todas mis fuerzas, que paren las guerras en todas de la faz de la tierra.

Paradójicamente en estas mismas horas las mesas se preparan para celebrar la salida de este año y dar la bienvenida al que asoma, mesas con los mejores manjares ,con los trajes de gala ,con las ciudades llenas de música ,de tracas, de colores, y en cambio un Cielo que llora, no porque este lloviendo, es porque que está llorando.

Amigos que esta noche al tomar las doce uvas que dicen, son y dan la buena suerte, pensemos todos en los pueblos que están sin comida, sin luz y sin la protección de una Paz a los que todos los seres humanos tenemos derecho.

Que paséis una feliz entrada de año a todos, seguramente y si Dios quiere, también las tomaré, pero también acompañaré al Cielo en su luto.

Encarna Recio Blanco.





sábado, 13 de diciembre de 2008

Ya estoy limpia



Ya estoy limpia de polvo y de paja.

Ya estoy limpia de tela de araña.

Ya estoy limpia de amigas profanas.

Ya estoy limpia de pinturas falsas.

 Del pecado de todas las semanas.

De mendigar unos besos.

De un abrazo de esperanza.

 Ya estoy limpia de mi  padre

      Murió sin que yo lo esperara

Sin tiempo para darle

Un último beso en su cara.

 ¡Ya estoy limpia de todo!

¡Y estando tan limpia!

¡Tan Recia y tan Blanca!

Me siguen mirando…

De una forma rara.


 Encarna Recio Blanco


 




martes, 9 de diciembre de 2008

Estoy frente al mar


Estoy frente al mar sin ver

Que llegan las olas rugiendo,

Al compás de mi corazón

Que hoy no sé, si llevo dentro.

 Chocan furiosas las olas

Con las rocas que en silencio

Aguantan el vendaval

De éste mar salvaje y fiero.

 Hoy ruge mi corazón

Más que éste mar sin consuelo.

Hoy no quisiera sentir

El sentimiento que tengo.

 Éste mar hoy me transmite

Lo que traté de esconder.

El viento me silba algo

Que yo no puedo entender.

Le di todo lo que había en mí.

Mis caricias y mis besos.

Mi cuerpo de calenturas

A un truhán y un embustero.

 Ni un adiós por despedida.

Ni un hasta luego le debo.

Se llevó mi corazón

Dejándome el desconsuelo.

Pregunto a las gaviotas.

Pregunto al Dios de los Cielos.

Pero nadie me responde

Y sigo diciendo… te quiero.


 Encarna Recio Blanco.





viernes, 28 de noviembre de 2008

¡Cómo está la cosa!


¡Cómo está la cosa! Ya no se puede aguantar

Si ves el telediario te entran ganas de llorar.

Un día detienen a doce. Al día siguiente a catorce.

Unos pidiendo perdones y los otros calladitos,

Por si los llaman al orden.

Las fuerzas públicas  no dan a bastos con los furgones…

 Los jueces hacen guardias ya no pueden más,

De día y de noche.

Ahora se llevan a uno, luego devuelven a dos 

Desayunan en la cárcel y comen en su comedor.

Están tirando del hilo y más se enreda la madeja.

Unos  corriendo a Suiza y otros trotando a Ginebra.

Mucho ruido y pocas nueces eso decía mi abuela…

Para ir tapando bocas mientras esconden las perras.

Los hay de todos los partidos de derechas y de izquierdas

Ya sin la hoz ni el martillo porque eso…

Ya se ha pasado de fecha.

Muchos tienen que correr  por los pasillos

Para cambiarse de pantalones, aunque el olor les delata

Sonríen como bufones.

¿No les da vergüenza de ver  cómo está el país?

Los jóvenes sin trabajo, los pensionistas congelados,

 Los niños hambrientos  y desabrigados.

¿Qué está pasando Señores en esta España cañí?

Ni toros ni castañuelas ni un pasodoble para bailar y reír.

 España está cabreada, malhumorada parada, desamparada.

Con hambre y sed de justicia. ¡Pero callada!   ¡Pero callada!

¿Podemos cambiar las leyes?

¿Podemos eliminar a los corruptos?

¿Podemos parar tantas injusticias?

¿Podremos algún día vivir en paz?

¡Qué suerte tenéis gobernantes!

¡Qué suerte tenéis!

Un pueblo digno.  ¡España!

Pues que os dure…

¡Que ya os va quedando poco!

¡Muy poco!


Encarna Recio Blanco




sábado, 15 de noviembre de 2008

Amor prohibido que llegas...



Amor prohibido que llegas

Cuando menos te esperaba,

Destrozando  mi Mundo

Entre el fuego y la escarcha.

¿Quién puede ya detener?

El volcán de los deseos

Que rugiendo nos despierta

De nuestro añorado sueño.

 Miradas que entre sonrisas

Esconden la tramontana,

De seres que no han amado

Ni se han besado con ansia.

Si pudiéramos tener

Un rincón en la montaña

Donde guardar con gran celo,

Lo que encierran muestras almas.

Si pudiéramos conseguir

La libertad tan soñada…

Pero este muro es muy fuerte

Y sin piedad, nos separa.

¡Qué fuerte Dios lo que sentimos!

¡Qué grande lo que vivimos!

Pero infringimos las leyes

Y nos llevan detenidos.

El Mundo dirá mil cosas

De los fugaces encuentros,

De las noches que perdidos

Anduvimos por el Cielo.

Pero callaran las lenguas

Cuando divisen el puerto,

Donde anclados conseguimos

Que navegara lo nuestro.

¡Quién se atreve a censurar!

¿Quién osa decir esas palabras?

Sin saber lo que se siente…

Cuando se está enamorada.

 Encarna Recio Blanco.




En lo alto de una encina




En lo alto de una encina.

En el monte solitario.

Entre las olas del mar

Un truhán viene cantando.

Un cantar que yo no entiendo.

Unas letras caducadas.

Una sonrisa fingida

Con una venda tapada.

 Las ninfas y los demonios

Le acompañan en su farsa.

Vienen con la capa negra,

Con laúdes y guitarras.

El cortejo se aproxima

A la encina solitaria

Donde yo mecía mi amor

Lejos de viles patrañas.

Quiero correr y no puedo…

Estoy de manos atadas

Con mis ojos fijos y abiertos

Pero no puedo ver nada.

El Cielo me abre sus puertas

Para asilar a mi alma

Que huye despavorida

De este Mundo...Que me engaña.


 Encarna Recio Blanco.