Le
suplico a Dios que me diga
Porqué
lloran las estrellas.
Porqué
se ha parado el mundo
Entre
la escarcha y la niebla.
Le suplico que me diga
Porqué
no veo salidas,
Para
quedarme en tus brazos…
Toda la
vida.
Quiero saber y me impongo
Que me
dé una explicación.
Merezco
que ésta condena
La
entienda mi corazón.
A mi Dios quiero decirle
Que me
descifre el mensaje
Y me
dicte la sentencia
Que he de cumplir…
¡Por amarte!
Encarna Recio Blanco