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viernes, 13 de diciembre de 2019

El hambre no se oye…


El hambre no se oye…

Ni suena como la tormenta.

Ni como las bombas estallan.

Ni como una orquesta desafinada.

El hambre  dormita silenciosa

Bajo los puentes arrebujada

En un ser humano que calla.

El hambre no se oye…

¡El hambre! ¡Se siente!

 

Encarna Recio Blancos.



miércoles, 6 de febrero de 2019

Nací, en una posguerra...


Nací, en una posguerra, cuando la comida escaseaba.

Cuando no había ni lumbre, ni leña.

Mi madre lloraba cuando me tomó en su regazo.

La comadrona dijo al oír mi alarido

Que parecía un leopardo.

Nací, cuando los hombres volvían derrotados

 Del frente, con los ojos secos, con el hambre acuesta.

 Cuando los niños de harapos llenos, no tenían

Ni  un mendrugo de pan que llevarse a la boca.

Cuando en el campo el arado esperaba las simientes,

Para hacer el alimento de los indigentes.

Cuando todo escaseaba  llegué dando gritos.

Porque ya percibía que tenía hambre, y frío.

Tal vez, ya me preparaba para demandar

 Justicia, Paz, y Solidaridad,

Para todos aquellos que la padecieran.

…Y aquí sigo demandándole en un mundo de sordos.

 Donde algunos se enriquecen con el sudor de los otros,

 Y a ellos, les sobra de todo.

Mientras los pobres carecen de lo más necesario.

Ni pan, ni agua, ni abrigo, ni justicia para corregirlo.

 Entre balas, pateras, fronteras, perecen, en un mundo,

Donde el poder y el dinero, es lo que cuenta.

 

Encarna Recio Blanco




lunes, 14 de abril de 2008

Me rebelo contra el Mundo

Me rebelo contra el Mundo, contra locos mandatarios

Que no cumplen con justicia, lo que les encomendamos.

Si se paran a pensar en donde estamos metidos

Nos iríamos corriendo, a otro edén desconocido.

Así no podemos seguir, nada va como debiera

Los mares contaminados, y la tierra que se seca.

Las guerras se multiplican y nos llamamos humanos

 Incívicos con un mundo que hemos intoxicado.

Los hombres matan a sus mujeres con el amor como excusa

Palabras que no conocen y que no han sentido nunca.

Los valles antaño verdes hoy te tiñen de dorado

Desbastados por las llamas en cenizas se han tornado.

Los poderosos Señores que dirigen nuestros pueblos...

No buscan las soluciones, pero se suben el sueldo.

 No son ellos los culpables también lo somos nosotros,

Por no cuidar nuestro entorno que enfermo pide reposo.

 Hagamos algo muy pronto aunque nos parezca tarde

Porque si no lo enmendamos cualquier día

 Saltaremos por los aires.

¡A trabajar Mandatarios y limpiar bien este Mundo!

De guerras, de Nucleares, de hambre, de injusticias  

Y de escombros.

Me rebelo contra el Mundo, contra locos mandatarios

Que no cumplen con justicia, lo que les encomendamos.

 

Encarna Recio Blanco.