lunes, 21 de abril de 2008

Me aportas la calma



Me aportas la calma del mar despejado
Cuando me abandonas te robo un pecado
Me das la auto estima de los abnegados
La falsa moneda de un lápiz gastado

Capitaneabas barcos enlatados
Y nos conocimos en ellos montados
Llévame a otra parte, a un cielo halado
A una montaña perdida sin lazos

Sácame del mundo, del sutil silencio
Y llena mi espacio diciendo te quiero
Quítame los años que ya no los quiero
Si no estás conmigo solo soy veneno.

Saca de este cofre todos los recuerdos
Por si no nos vemos, en ellos te espero
Contempla un futuro lejano y certero
Imagina sueños y escribe un deseo.

Si yo anoto uno y los dos coinciden
Tal vez vida mía el cielo se rinda

Y podamos robarle...una nueva vida.

Encarna Recio Blanco.


domingo, 20 de abril de 2008

Para Joshua



Tú también eres poeta

Por el ramo de violetas

Que me envías.

He comprendido que tienes

Alguna pena escondida.

 Todo el que ama el amor

Tiene llagas y se queja

No siempre es correspondido

El desamor, también llega.

 Tu correo recibí, tarde

Un fallo puede que hubiera

Pero gracias por las flores

Que mandas a mis poemas.

  Encarna Recio Blanco.





Conocí el amor en Navidad



Conocí el amor en navidad Y el desamor en verano

En primavera comprobé cómo se siente un fracaso

Y en otoño comprendí, que todo acaba pasando.

 ¿Cómo se puede olvidar lo que causa tanto daño?

Lo que provoca el placer, lo que envejecen los años

¿Cómo podemos pasar tantas horas cavilando?

Nos dejarnos encerrar, como esclavos.

 Caricaturas prohibidas roídas sin descanso

Por un miedo abrasador que desprenden nuestros años.

Por un castigo sin celda y un león que está llorando.

Niños en coros perdidos, cantan un son algo raro.

¿Estaré perdiendo el norte en mi brújula de estaño?

O se habrá secado el sol si dejamos de regarlo

Maldita fue la mañana que decidimos amarnos

Maldita para los dos, la pena estoy soportando

 Se agota en ésta  paciencia que queda mi fe pequeña

Ni  me atrevo, no puedo ya más negarlo  una salida a este cielo.

Adiós para siempre a las olas, para siempre y te ruego

Que no vengas a por mí sí me voy…

Es porque quiero.


Encarna Recio Blanco.


sábado, 19 de abril de 2008

No se si eres hombre



Chechu:

No sé si eres hombre

O si eres mujer.

Pero tu poema

Me sabe a miel.

Amigo querido de una tierra

Que siempre está en flor

Con mares que ríen

Al ponerse el sol.

Hoy me has visitado

En mi pequeño rincón

Donde cada noche

Esparzo la  ilusión.

 Te mando una copa

 De paz y del mejor amor

Que es la medicina

Más poderosa para el corazón.


 Encarna Recio Blanco.


Es un crucigrama esta vida


Que crucigrama es esta vida loca

Que anda deprisa si siento tu boca

Que mueve mareas con solo mirarme

Que bebe los vientos casi sin tocarme.

 Un autodefinido de ideas deformes

De cálculos inexactos que saben tu nombre

Y gritan  al tiempo pidiendo testigo

Cuando entre las sombras somos los queridos.

 Dos almas gemelas de un momento herido

Nacieron distantes en tiempos dormidos

Todo  lo separaba al amor prohibido

Y cuanto más lejos, más embravecidos.

La pasión es sólo para los amantes

Que no tejen telas ni saben de encajes

Que aman en barcos siempre a la deriva

Derriban los  años sin buscar salidas.

Las causas perdidas son para los locos

De esos que viven y piensan muy poco

Que no ven la vida como su sendero

Sino cual momento único y certero.

¡Es un crucigrama esta vida loca!

Encarna Recio Blanco.


En la montaña mas alta


En la montaña más alta

Se encuentra mi corazón

Escondido bajo ramas

Y cubierto de tu olor.

 

Cuando vienes a buscarlo

De nuevo brota el amor

Y cuando no vuelves

Se apaga su resplandor.

 

La tierra donde plantaste

Tu alma ya floreció

Ahora ya sabes de heridas

Porque sabes del amor.

 

Y es que siendo tan humano

Dios te quiso enseñar

Aquello por lo que el hombre

Al mundo viene a pagar.

 

Coge tu tren, aún no es tarde

El billete ya saqué

No me importaría  esperarte

Si me prometes volver.

 

Vámonos ya no pierdas tiempo

Porque  es difícil oír

En los tiempos que corremos

Lo que te vengo a decir.

 

¡Te quiero, vida mía!

¡Vámonos pronto de aquí!

 

Encarna Recio Blanco.