Por la
calle de las ánimas van tres beatas con mantillas.
Las
campanas de la iglesia tocan que tocan, a misa.
Me miran
con gran descaro porque llevo minifalda,
El pelo
tirando a rubio y una melena muy larga.
En vez de
correr me paro delante de estas fanfarrias,
Para
decirles que recen por las que estén descarriadas.
Por las
que tienen maridos y amantes meten en casa.
Por las
que abortan maridos de las que están bien casadas.
Por el
jefe de su hija que la tiene colocada
Y se dice
por el pueblo que le ha comprado una casa.
Por el
marido de la otra que a la cárcel fue a parar,
Porque
dio talones falsos a quien tenía que pagar.
Por su
suegra en un asilo cuando la herencia cogieron
Dejando a
la pobre vieja que se pudriera allí dentro.
Ahora me miran con rabia de oír lo que yo les
digo
Y se
arreglan la mantilla con un mohín encendido.
¿Que
pedirán al Señor al rezar el Padre Nuestro?
¿Qué les
perdonen las culpas o la envidia que sintieron?
Falsas
monedas portaban con un grande Crucifijo.
Por la
calle de las ánimas…murmuraban los tres bichos.
Encarna
Recio Blanco.