Tuve la Gloria
en mi vida
No sé
como apareció,
Tal vez,
el destino quiso
Que
volviera a creer en el amor.
Fue
entonces que se apartaron
Las
tormentas de mi vida.
Los aires
huracanados
Y las
noches sin sonrisas.
Fue
entonces que ya los días
Eran de
vino y de rosas.
De
placenteros momentos
Acunados
a deshoras.
De creer
que Dios es bueno.
Que el
mundo me sonreía.
Que la
esperanza tan oculta
Con
raíces florecía.
Tuve la Gloria
en mi vida
Y las
penas se alejaron.
Las armas
de la batalla
En el
fuego se quemaron.
Las horas
se sucedían
Con el
néctar de su boca
Con su
cuerpo que emanaba
Caricias
a todas horas.
Me
emborrachaban las noches
Junto a
su cuerpo de Diosa,
Y cuando
el alba asomaba
No hacía
caso de las horas.
Pero de
pronto un mal día…
La Gloria
se me fugó.
No dejé
la puerta abierta
Pero sin
más, se escapó.
Yo
pregunté muchas veces
Al Dios
que me la mandó
Porqué me
la quitaba ahora
La Gloria
que me envió.
Ahora
vivo sin vivir.
Los
recuerdos no me bastan,
Y la soledad me dice:
Que
serene mi alma.
Pero el
infierno se ríe
De que no
tengo esperanzas…
Y me
contengo las ganas
De llorar
muchas mañanas.
Encarna Recio
Blanco
¡vaya forma de retratar los verdaderos sentimientos! Parece como si estuvieras dentro de mí para saber qué siento. Felicidades.
ResponderEliminarJuan José