
Apostados en la esquina veo
una cuadrilla,
Están repartiendo los
votos, para las elecciones
Que se avecinan.
Los primeros son de
izquierda, con barbas
Y caras serias, y cuando
alguien se acerca,
Le endosan la papeleta.
Los otros son de
derechas, bien vestidos
Y educados que se
acercan y te dicen:
¡Que la crisis se ha acabado!
Los de enfrente son del
centro, estos van
Con música caribeña, te
saludan y se jactan
Diciendo, que ganarán la
contienda.
Tal vez estén en el paro,
los pobres,
Esos que te dan las
papeletas, y el partido
Les ha prometido un salario
de primera.
Les han dicho que si
ganan las elecciones
Les van a enchufar en Cáritas
para que coman
Caliente todas las
semanas.
Hay un revuelo por la
plaza de lenguas que vitorean
Cada uno a su partido, sin
que nadie los entienda.
Estoy mirando el tumulto
y me asoma la vergüenza,
De los pobres
charlatanes que les pagan,
Con una simple merienda.
¿Dónde están los peces
gordos?
Dice uno que les contemplan
en aquella plaza
Que me parece, el circo
de las pendencias.
Ellos estarán en sus
yates, dice el otro que se acerca,
O en sus enormes
mansiones, sin dolores de cabeza.
O se irían de vacaciones
alguna playa desierta,
Donde el presidente de
allí, les regale hasta una hacienda
Mañana aparecerán sin
corbatas ni chaquetas,
En el mitin que darán, en
la puerta de la iglesia.
Encarna Recio Blanco.