Anoche en mis sueños
Dios me
despertó
Fue
cual un suspiro
Que el
viento envolvió.
Salté de la cama
Y me fui
a su encuentro
Me
arropaba con su manto
De
nubes y Cielos.
No me reprochaba nada
Sólo me
abrazaba
Y en
aquel abrazo
Se
abría mi alma.
Me traía recuerdos
Que
había olvidado
Y
muchos deberes
Que
tenía atrasados.
Le conté mis cuitas
Mis locos desengaños
Todas
mis heridas
Le mostré
sangrando.
Tengo que marcharme
De
pronto me dijo:
Yo le
dije, espera…
Quiero estar
contigo.
Con dulce sonrisa
Me dijo
al oído
Sigue
faenando
Siempre
estoy contigo.
El sueño se fue
Mis
ojos se abrieron
Él se
había marchado
Me
quedé en silencio.
Pero por los aires
Mil
rosas vinieron
Eran del
perfume
Que Él
dejó en mi lecho.
Encarna Recio Blanco.