Aunque tú no me entiendas nunca escribo
el remite
En mis cartas para no dejar huellas.
Y te he visto a lo lejos sin
darme la vuelta.
Y la he vuelto a abrir cuando
llegabas.
Cuando mi cama fría estaba desierta.
Y los encendía mi cuerpo fogoso esperando.
El amor y el dolor caminan juntos los dos.
Mientras otra mujer espera…como espero
yo.
Encarna
Recio Blanco.
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