jueves, 8 de mayo de 2008

Llegabas cansado y absorto


Llegabas cansado y absorto

Con vacilantes pensamientos

Sopesando tu amor y los despojos

Cuando antaño brilló tu corazón.

 

Venias con palabras de cariño

A envolverme de ternura y de pasión

El momento, el mar y los altillos

Que de noche se ven en mi balcón.

 

Yo te miré y en mis ojos

Percibiste una nota de dolor

Fuè más fuerte la guerra y el enojo

Que el amor y la paz, que sentí yo.

 

Ni siquiera nos dijimos dos palabras

Y la vuelta de tus pasos escuché

Comprendí que no volvería a verte

Y que mi amor se aniquiló.

 

A veces, dos líneas que convergen

Surcan el Cielo en recto amanecer

Y que por rabia, rencor y otras cosas

Las dejamos marchar sin compasión.


Encarna Recio Blanco.




No hay comentarios:

Publicar un comentario