viernes, 1 de noviembre de 2024

La tormenta y el vendaval llegaron...

 


La tormenta y el vendaval llegaron sin previo aviso

Los cielos se abrieron  para llorar a lágrimas vivas.

Entre rayos, truenos, y pedrisco iba arrasando

Todo lo que a su paso aparecía.

 La noche estremecida de luto se vestía

Para aguantar los vaivenes que la envolvían.  

Todos los  demonios salieron de sus infiernos

Para seguir persiguiendo a los que felices dormían.

El viento seguía rugiendo cual un león con hambre

El cielo se iluminaba y los truenos resonaban

Gritos a lo lejos se oían sin que pocos pudieran acudir

 Al lamento de quienes iban muriendo en las alcantarillas.

El agua en un instante  en negro fango se convertía

Y en su loca carrera arrastraba  sin piedad vidas…

Enseres, sueños, recuerdos y todo aquello

Que con tanto trabajo se consigue en la vida.

El silencio, el desasosiego y la tristeza

Hacen mella en mis manos que no pueden

Plasmar el horror tan tremendo que supone

Descifrar la pena y la tristeza que me anida.

Entre lágrimas y oraciones mi pluma entristecida

Pide a Dios que ponga sus Santas manos en todos aquellos

Que están sufriendo y les permita saber…

Que sus seres queridos están felices con Él…

En la otra vida.

 

Encarna Recio Blanco.


miércoles, 30 de octubre de 2024

En la noche de los Santos...

  


En la noche de los Santos, están las calles desiertas

El olor a crisantemos por los aires, deja su estela.

Está llorando la noche, las velas relampaguean

Y una música lejana por  el cielo parpadea.

Un susurro de guitarra acecha triste y serena

Y en el mensaje nos dicen, que nos están protegiendo.

La luna desde lo alto, esta noche está callada

Dos estrellas a su lado la acompañan en su danza.

En el monte se oyen pasos, alguien camina sin tregua

Llevan flores en el brazo y en las manos, unas velas.

Es la luz de los recuerdos que siempre, en el alma se lleva

Como el mar cuando devuelve, sus olas hacia la arena.

Hoy es el día de los Santos y os quiero felicitar

Viviendo de los recuerdos se puede resucitar.

En la noche de los Santos a todos os quiero decir

Que aunque no estén en la tierra…sus almas siguen aquí.

 

Encarna Recio Blanco.



lunes, 21 de octubre de 2024

En las brisas voy escribiendo...


 En las brisas voy escribiendo

En cualquier rayo de sol

Arriba  de una montaña

O en los brazos de un amor

En el canto de una alondra

En los suspiros del desamor

En el cáliz de una rosa

O en el rugido de un león.

En el filo de una espada

Y en el mendigo sin zurrón.

En las manos de una madre

Que nunca nanas cantó.

Por un camino empedrado

En el fusil de un sicario

Entre las olas del mar

O en el monte del Calvario.

En un mar con tempestades

Donde los barcos naufragan

En el Cielo y en la Tierra

Donde el arado se encalla.

 Por todos ellos escribiendo

Y recitando mis versos

Demandando la Paz  y la Justicia

Que quiero…

 ¡Para el Mundo entero! 


 Encarna Recio Blanco.


jueves, 17 de octubre de 2024

Sé que a veces estoy loca...


Sé que a veces estoy loca

Pero necesito más locura

Para no ver ni sentir este entorno

Que me agobia y me tortura.

Para no ser consciente

De  sentir a mí alrededor

La soledad, la amargura

La guerra, y la tortura.

Para no ver a los niños

Morir entre misiles y bombas

Entre las olas de un mar bravío

Sin salvavidas.

 Para no ver a farsantes

Con capas y espadas

Masacrar a los pueblos

Con sus letales armas.

 El poder y la mentira van unidos

Para aquellos que maquinan

Vivir a cuerpo de reyes

A costa del que mendiga.

 Por callejuelas sin salidas ondean

Banderas y panfletos

Bajo los puentes duermen

Los de sin techo.

 Para no ver que en el campo

Ya no se siembra nada

No hay sufridos jornaleros

Ni arados… ni azadas.

 Para no ver que se viola y se maltrata

A mujeres que van por el mundo

Temerosas y asustadas

Con hijos en sus entrañas.

Quiero más locura para no sentir

 Esta realidad tan dura

Que nos envuelve con su velo negro

A todos los que se esfuerzan…

¡Para encontrar la  Justicia y la Paz !

 

Encarna Recio Blanco.


martes, 15 de octubre de 2024

Cuántas veces recuerdo a mi abuela...


Cuántas veces recuerdo a mi abuela con sus faldas humildes y negras.

 En su cabeza, un pañuelo raído, y en sus pies, unas alpargatas  trenzadas, de rafia negra.

En las noches del invierno, nos llamaba  cuando la tormenta asomaba, cuanto el viento aullaba, o cuando el estruendo de la lluvia, nos asustaba. Sentadas en la mesa de camilla, con el poco calor que da un brasero sin brasas, apiñadas a su lado mis hermanas y yo, nos contaba, aquellos cuentos y consejos que tanto nos gustaban.

Tenéis que ir al colegio sin rechistar, nos decía…“Que el saber, no ocupa lugar” Aquella frase siendo tan niña en mi mente, no la podía entender, ni razonar.

¡De mayor, bien que comprendí aquellos consejos abuelita querida! “El saber, es romper las cadenas de la esclavitud”  No sé donde lo leí, pero lo grabé con fuego en mi mente, para tu consejo seguir.

Por eso, el mayor acto de rebeldía que hice en mi vida, fue estudiar, leer a los grandes, imbuirme en todo aquello que reforzara mi intelecto, para enfrentarme a la vida siendo una mujer libre.

Aprendí muy deprisa en la escuela de la vida, en la Universidad me formé también.  Pero aquellos consejos de mi abuela me sirvieron, para no olvidarme que con el estudio, el esfuerzo y el tesón, casi todo, lo podía conseguir.

  

Encarna Recio Blanco.



jueves, 10 de octubre de 2024

Tu cuerpo es la ofrenda...

 


Tu cuerpo es la ofrenda pura

Del más dulce veneno

A sorbos lentos relamo

Todos tus recovecos.

Voy a morir en el placer

Cuando me beba los momentos

Y en el fondo me pierda

Por tu cuerpo erecto.

Un quejido asaltará tu pecho

Cual tormenta arrasando los cielos

Y nos fundiremos en la fragua

Donde se dobla el hierro.

Nuestros cuerpos labriegos

Se afanan por el barbecho

Donde sembrarás tus semillas

En mi campo abierto.

 

Encarna Recio Blanco.