En
las manos tengo callos
De
escribir lo que nadie lee.
Tengo
un sentir que pesa más
Que
todos los sentires de esta tierra.
Tengo
en mis labios miles de besos
Que
nadie va a recibir.
Tengo
nanas dormidas sin poderlas cantar.
La
mente derretida de tanto pensar
Y
las fuerzas ya me fallan de tanto pesar.
Tengo
en mis ojos una venda que nadie osa quitar.
Y
con este cargamento voy a cuestas
Sin
que nadie detenga mi camino y diga:
¿Te
puedo acompañar?
Encarna Recio Blanco