Aún conservo en mi almohada
El calor de tu cuerpo
Los besos que me dejabas
Prendidos de mi lecho.
Te fuiste sin volver la cabeza
Sin un adiós lastimero
Sin pedirme perdón
Por robarme el amor.
Ni corazón para amarte
Laberinto de pasiones
Que se fueron volando
Por los aires.
Te fuiste…
Cual un esclavo al desierto
Encadenado y mendigo
Donde tus sueños
rotos
Serán tu martirio.
Hoy me despido de ti
Y recojo mis penas
Mis desengaños
Y mis tristezas.
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