Resulta
que soy famosa desde que me parió mi madre
Porque ella era bailadora
y mi padre, un buen cantante.
Y
aunque nunca en mi vida hice pocas cosas de provecho
Por la cuna que me
avala soy muy famosa por cierto.
Todos
los días de fiesta poniéndome un gran modelo
Me codeo con los
grandes aunque no lleve ni un céntimo.
Pero no imagina nadie
el precio que estoy pagando
Porque veo paparazzi hasta
cuando estoy soñando.
Si un día salgo de incógnito
con grandes gafas de sol
Con una peluca negra
y un vestido de charol resulta
Que el periodista que hace guardia frente a mi
casa
Me reconoce al
instante y me dice: ¿Dónde vas con esa facha?
¡No se te ocurra hacer fotos! ¡Le digo con voz
airada!
Y me dice el sinvergüenza
que de eso nada, monada.
Y en una revista me veo en la primera portada
Con un titular que
dice: “Esta ya no pinta nada”
No la
llaman para la radio ni la televisión la reclama
Porque dicen que un
cubano me chulea y no trabaja.
Si me voy con un amigo publican que ése es mi
novio
Lo que no saben
ninguno es, que no me como un rosco.
Un día,
que ilusa fui porque creí despistarlos a un maromo
Me llevé para que me
hiciera unos apaños.
Y
cuando en plena lujuria lo mejor iba llegando
Cuando miré al otro
lado… me estaban fotografiando.
Un
programa al día siguiente ¡Dios de mi vida que espanto!
No sólo salió la foto,
lo acompañaba, un jodio comentario.
Por eso ahora cuando
salgo de mi casa lo hago ¡Por el tejado!
Como los gatos…
¡Ay! ¡El
peso que llevo a cuestas es un peso muy pesado!
¡Pero
si quiero ser famosa… tendré que aguantarlo!
Encarna
Recio Blanco.