Caminaré
taciturna
Cuando ya nada me importe…
Sin volver la vista atrás
Por la senda de mi noche.
Me tacharan de loca.
De poeta incomprendida.
Quizás de samaritana
O de fulana furtiva.
Por nuestras calles secretas voy
Por
donde las sombras ardían
Cuando tu boca y mi boca
Pegadas se consumían.
Con mi maleta de sueños
Hoy pasé por última vez
Para ver si aún quedaban…
Mil besos por recoger.
Encarna
Recio Blanco.
Me encanta entrar y leer tus poemas, despacio, sin prisas.
ResponderEliminarGracias por escribirlos.