Hoy me
he puesto a hablar al viento
El que
te trajo aquel día
Cuando
asomaba el otoño
En mi
fría celosía.
Me dice que fue una orden
Que del
cielo recibió
Para
sacar las sonrisas
De
aquellos tristes
De mi
rincón.
Empezó a cantar la luna
Y aquel
triste ruiseñor
Y al
borracho que escapaba
De la
cárcel de un amor.
Empezamos a sumar
Como
buenas colegialas
Las
deudas de una ilusión
En las Ondas
solitarias.
Nuestro ángel sonreía
Mirándonos
a las dos
Como
prendimos el fuego
Donde
solo había carbón.
La travesía está en marcha
Tranquilo
y sereno el mar
Viento
en popa a toda vela
¡Lo
tenemos que lograr!
Hacer de las noches días
Al
triste dar alegrías…
Al que no tenga cobijo
Nuestra
eterna compañía.
Recia parece la noche
Pero Blanca
la tornamos
Entre
poemas que escapan
De unos
labios Encarnados.
Le doy las gracias al Cielo
Porque
te trajo al rincón
Donde
las estrellas brillan
Con los
ojos del Señor.
Encarna
Recio Blanco