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miércoles, 16 de mayo de 2018

La noche se queda sola...



La noche se queda sola con sus velos de misterios.

Cuerpos sin sueños sucumben en tálamos de hielo.

 Los aullidos de los perros me sobresaltan por el cemento,

Donde mis pasos caminan con rumbo incierto.

 Unas viejas me vigilan detrás de  visillos negros,

Están rezando el rosario, pero al verme, hacen un receso.

 A un ser humano me encuentro tirado, en el frío pavimento,

Con su botella vacía, y el corazón, por los suelos.

 Mi perro acelera el paso, cuando presiente que me acerco,

A decirle que es muy tarde y la escarcha está cayendo.

Me miró con unos ojos tan de pena que  en mis adentros

Sentí miedo al oírle  unas palabras  dolorosas, que reproducir

No puedo.

 Entonces, mi perro empezó a ladrar, como  un alma  

Que el demonio lleva, de un tirón se soltó de mi mano

Y salió corriendo por las aceras.

 ¡La  noche se queda sola!

 Gatos, perros, en revuelo, un  ser humano bebiendo vino

Como si  fuera veneno tirado…en el frío cemento.

 

Encarna Recio Blanco.

 


lunes, 11 de diciembre de 2017

Entrégate-De mi último libro (Atardeceres de fuego)


 

Entrégate con la ambición

De un borracho

En la taberna de mi cuerpo.

  Entrégame tus misterios

Para que yo lo despliegue.

 Navegaré con los frutos

De tu voluptuosa cosecha,

 Esparcidas por mis senos

Que ardientes lo esperan.

 Cráter de lava que me ciega,

 Huracán que me eleva

Por la pendiente de la locura

En el paraíso, de nuestra noche sin luna.

 No te detengas…no te detengas y sigue,

Al ritmo pausado de las cuerdas,

De la guitarra y de tus dedos,

Sobre mis piernas.


 Encarna Recio Blanco.





domingo, 1 de enero de 2017

Entrégate…





Entrégate…
Entrégate con la ambición,
de un borracho en la taberna
de mis cuerpo.
Entrégame tus misterios
para que yo lo despliegue.

Navegaré con los frutos
de tu voluptuosa cosecha,
esparcidas por mis senos
que ardientes lo esperan.

Cráter de lava que me ciega.
Huracán que me eleva
por la pendiente de la locura
en el paraíso,
de nuestra noche sin luna.

No te detengas…
No te detengas y sigue,
al ritmo pausado de las cuerdas
de la guitarra, y de tus dedos,
sobre mis piernas.


Encarna Recio Blanco

Encarna Recio Blanco.

De mi último libro…
(Atardeceres de fuego)








Escucha"Entrégate…" en Spreaker.

miércoles, 14 de diciembre de 2016

Sólo el abismo nos vigila.


Sólo el abismo nos vigila

Para engullirnos en sus infiernos,

Nuestros cuerpos, destilando amor,

Se hunden por el misterio.

El fuego de la carne nos abrasa

Las palabras enmohecidas se atragantan

Bajo la noche que nos ronda

En el tálamo escarlata.

Sabor a pimienta  entre nuestros labios,

El fuego arrasa nuestras almas,

Por el adiós que se aproxima,

Sin concluir, nuestra labranza.

  

Encarna Recio Blanco.




viernes, 28 de octubre de 2016

Hoy camino de un lado para otro...


Hoy camino de un lado para otro

Sin bastón donde apoyarme

Sin unos labios que prendan mi fuego

Y sin el perfume vertical de las estrella.

 Hoy me adentro en un mar misterioso

Lleno de olas errantes

Que me arrastran violentas

Hasta un arrecife de corales.

 Jadeante me quedo varada

Pidiendo al buen Dios que me salve

Y el rayo del Cielo iluminó

Una Cruz para apoyarme.


Encarna Recio Blanco.



sábado, 12 de abril de 2008

La noche augura misterios


La noche augura misterio.

La luna que antaño fue clara

Hoy se desviste en silencio.

Las estrellas ya no brillan

Y los Ángeles cayeron.

¡Hoy llueven lágrimas del cielo!

No sé quién está sufriendo

Siento que se acaba el mundo

Que se abren los infiernos.

Que la pasión es locura

Y que la locura es sueño.

¿Dónde estás en esta noche?

Que te busco y no te encuentro

Que mis rincones vacíos

Esperan tu aliento.

La noche augura tristezas

Ánimas que buscan puertos

Caminantes que cansados

No tienen refugio cierto.

La noche augura pecados

Para los amantes tiernos

Para las ninfas del bosque

Para los buenos momentos.

Las llanuras de mi cuerpo

Cual rosas que se desgranan

Piden cabalgar contigo

De la noche a la mañana.

Que con las tuyas me ciegue

Hasta que nos llegue el alba

Que enloquezca mi cuerpo

Y que se aloque mi alma.

Mi cuerpo pide locuras

La pasión se desparrama

Y las ansias no resisten

Este fuego que me abrasa.

¡Lava, fuego, a gua, calma!

 Pide mi cuerpo deseos

Cual una loba encelada

Cuando tu cuerpo y el mío

Chocan en la fiel la labranza.

Se abandona mi cuerpo en el tuyo

Que tierno también estalla.

La noche nos hace un guiño

 Y una estrella nos canta

Una serenata.

 

Encarna Recio Blanco.