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lunes, 29 de octubre de 2018

No me preguntes...


No me preguntes cuantos años tengo.

Pregúntame si tengo sueños si todavía soy

Joven o viejo.

Lo que importa es que soy un hervidero de sueños.

Si no, soy un fardo de la esperanza muerta.

 No me preguntes cuantos años tengo.

Si no cuantos besos di, besos de amor.

Si la juventud en mi es todavía una fiesta.

Si aprovecho cada instante.

Si bebo de la taza de la vida gota a gota.

Entonces…

 Poco me importan cuántas gotas quedan.

¡No me preguntes cuantos años tengo!


Encarna Recio Blanco



sábado, 10 de marzo de 2018

En vela de noche y día...


En vela  de noche y día,  paso contando las horas,

Por tu querer traicionero la pena, me está matando.

 En penitencia  pregunto al Dios que nos da la vida,

Por qué te fuiste con ella si era a mí, a quien querías.

Llevo tus labios pegados a mi boca, vida mía.

Tus ojos son en mis noches las estrellas que me avivan.

Los dolores de mi alma tan sólo los calmarías

Si volvieras  a mi lado para el resto de mi vida.

En vela de noche y día, se agudizan mis tormentos,

Al pensar, que en otros brazos se está quebrando tu cuerpo.

Y yo sé, que tú me quieres, que me buscas a escondidas,

Por la calle de las ánimas vas, con la cruz de la agonía.

Sé que me añoras en tu cama cuando tu cuerpo se enciende,

 Y que se  apaga al ver…a la que a tu lado duerme.

 Maldita sea la conjura. Maldito sea el dinero.

Que no podrá comprar nunca un amor tan verdadero…

¡Como el nuestro!

 

Encarna Recio Blanco.




lunes, 27 de mayo de 2013

No quería vivir mi vida...


No quería vivir mi vida sin tu sueño

Y a través de la distancia mendigando…

Logré un trocito del Cielo como regalo.


Y duró, lo que dura un suspiro atragantado

Lo que dura la flor en el naranjo helado

 Lo que dura un te quiero amurallado

Lo que dura un segundo en un cuerpo

Agonizando.

 

No quería vivir mi vida sin tu abrazo

Sin el fuego de tu cuerpo en mi costado

Sin tus palabras trasnochadas en el alba

Desde un mar que siempre azota

A mi barco encallado.

No quería vivir mi vida sin ti.

Por eso hoy… te la regalo.

  

Encarna Recio Blanco.


viernes, 22 de febrero de 2013

Se me olvidó...



Se me olvidó
en el día que estaba.
El año que corría
y donde me encontraba.

Se me olvidó
la hora que era
si era verano,
o primavera.

Se me olvidó
desde donde partí
aquella sola noche
que no fui de ti.

Se me olvidó
que eras de otra
que también te quería...
¡!Como  yo te quiero, ahora!


Encarna Recio Blanco







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domingo, 7 de octubre de 2012

Y mis días...





Y mis días se suceden
al compás de tus palabras
Ellas son el alimento
de mi alma.


Encarna Recio Blanco





miércoles, 15 de octubre de 2008

Fueron tantos días


Fueron tantos días.

Tantas noches.

Tantos momentos…

 Que por más que yo le pida

 A mi fe que siga ardiendo

Ya se  ha negado a alumbrar

 En nuestro mundo secreto.

Me dice que quiere irse

Descansar de éste tormento

Que ya no puede esperar

Ni un momento.

 He atado bien las esperanzas

La pasión y aquellos besos

Y cuando  las di de espaldas

Todas volvieron corriendo.

Me suplican que libere

 A mi pobre corazón

Que llora por las esquinas

Pidiendo perdón.

Sé  que  no pueden salvarse

 De esta condenada de amor

Por un delito con pena

Que la luna me incitó.

La gente mira riendo

Y se burlan de mis pies

Que corren buscando algo

Que no se puede coger.

No me llamas

Y cansada de esta espera picasiana

Grito pidiendo a la Virgen

Que responda a mi llamada.

No le pido que me quieras

Ni que me jures eterno amor

No le imploro  tu presencia

Sólo le pido perdón.

Sólo deseo que  Ella entienda

Que yo ya no puedo más

Que esta carga me atormenta

Y me duele esta verdad

De saber que estoy amando

A quien no me puede amar.


 Encarna Recio Blanco.


sábado, 13 de septiembre de 2008

Hay momentos en la vida


 Hay momentos en la vida en que a veces, el alma te pide un respiro, el corazón un descanso y el cuerpo roto, te dice que pares.

 Cogí mi macuto repleto de libros para devorarlos, mis poesías que dormían tranquilamente en un rincón de mi memoria, cuatro faldas y un pantalón raído y me tiré como la cabra al monte.

Me perdí por una senda donde sólo se oía a los pájaros, a los árboles con sus vaivenes llenos de ése sol que quema y que abrasa en el verano mediterráneo, pero que su sombra me servia como cobijo en los atardeceres.

 Sin relojes que me anunciaran cuando y como, tenía que seguir o parar, sin periódicos que me sobresaltaran por las noticias cada vez más inquietantes, lejos de la  recesión, la inflación y tantos epítetos, de los políticos de turno, de la tan cacareada crisis económica, que me hacía reír cada vez que veía a las caravanas de coches enfilando las costas, y que por supuesto, tenían la necesidad y el derecho, de disfrutar de sus vacaciones cada uno como les diera la gana.

Siempre he sido testaruda y poco paciente para mis cosas, he querido poseer montañas aunque estuviera debajo de las arenas movedizas de este mundo, pero Dios, el mundo, la vida que siempre está condicionada por elementos ajenos, a veces, te dice que pares un poco y le hice caso.

Por eso me he perdido,  para encontrarme y aquí estoy con mi piel que negrea, pero con mi alma relajada, con más fuerzas y nuevas ilusiones para seguir en la brecha.
Deseo amigos que cada uno de vosotros hayáis disfrutado de un verano a vuestro gusto, y que ahora empecéis con ánimo, con alegría a ganar el pan nuestro de cada día.

Un beso para todos los que me leéis, y para los que no les guste la poesía decirles que se abstengan de entrar en este blog y menos de poner comentarios obscenos, que pueden herir a mis amigos, que en resumidas cuenta sois vosotros.

De nuevo con vosotros amigos en el rincón de la paz el amor y la poesía.

 Encarna Recio Blanco.



sábado, 3 de mayo de 2008

Algunos pasan juntos...



Algunos pasan juntos miles de horas al día

Nosotros sólo segundos, pero valen una vida.

Hay gente que duerme junta todos los días del año.

Nosotros, tan sólo uno pero nos amamos.

 Hay seres que  van caminando por la misma vereda

Y con distintos destinos.

Nosotros somos dispares y nunca partimos juntos

Pero estamos siempre unidos bajo la luz de ése punto.

Algunos pasan el tiempo durmiendo bajo montañas

 Y nosotros las soñamos y escalamos las más altas.

Hay personas que envejecen al lado de quien se casa

Ni se miran a los ojos y no se conocen de nada.

Tú y yo a cada lado de un mundo tan diferente

Moriremos abrazados lejos de toda esa gente.

Hay vidas que se recorren en un mísero momento

Y momentos que se viven…hasta el final de los tiempos.


Encarna Recio Blanco.





domingo, 13 de abril de 2008

Años porqué



Años…

¿Por qué pasasteis tan rápidos?

Llevándoos prendidas mis ilusiones

¡Parad…parad!

Que se ha prendido de mi rosal

            Un lucero…  

Y no quiero que se me escape.


 Encarna Recio Blanco.






domingo, 30 de diciembre de 2007

Ay! dolor... dolor.





¡Ay! dolor, dolor.

Otra vez quieres ser mi compañero.

¿Por qué viniste a verme si no te echo de menos?

 ¡Ay! Dolor, dolor. Prefieres mi compañía,

Porque yo de vez en cuando hasta te escribo poesías.

Si te recibo llorando. Agotaste mi energía.

Vete lejos unos años. Vete lejos muchos días.

 Ya he  disfrutado bastante

Dolor…De tu negra compañía.


Encarna Recio Blanco